Fisting -Tips y cuidados -
Quizás alguna vez pensaste en que en tus cavidades no iban a entrar ciertas cosas porque eran demasiado grandes.
Bueno lo bueno es que con entrenamiento, relajación y consenso en la cama se pueden hacer varias cosas.
Hoy te presento al Fisting. ¿El qué? El fisting es una práctica erótica, muchas veces ligada al BDSM, pero no exclusiva de ello, en la cual se introducen los puños o la mano de manera parcial o total tanto en la vagina como en el ano.
Ya sé, seguro hiciste una cara de dolor o de sorpresa. Es entendible, no se habla mucho de esta práctica.
Hablemos de qué cosas deberías tener en cuenta para poder realizarla si te interesa:
- Vas a necesitar muuuucho lubricante, el más natural y sin efectos que consigas cerca de tu casa. Puede ser de farmacia o sexshop.
- Comunicación con la persona con la que estés practicando fisting.
- Si aparece dolor o molestia, por favor no sigas avanzando. Comunicalo y frená.
- Recordá que para que no haya lesiones debes ir de menos a más, podés empezar con dedos o juguetes y a medida que te sientas cómodo o cómoda aumentar el diámetro.
- Necesitás conocer a tu cuerpo para poder realizarla y conectarte con el placer, así que si no lográs que entre todo el puño a la primera experiencia, no te frustres. Podés volver a intentarlo otro día.
- Ayudate de la respiración diafragmática para relajar tu cuerpo. Es la que se hace desde la panza, como en yoga o canto.
- Disfrutalo y conectá con tu deseo y placer.
Espero que te hayan servido estos tips guía para practicarlo.
Cualquier inquietud sobre tu sexualidad o relaciones de pareja no dudes en consultarme.
Abrazos, Alex
